domingo, 20 de octubre de 2013

Casetas del pulpo

Lugo es la capital de la provincia del mismo nombre, se encuentra al noroeste de España en Galicia. Su origen es romano y la fundó Paulo Fabio Máximo en el año 25 a.c. siendo la más antigua de esta comunidad autónoma. 

Alrededor del 5 de Octubre se celebran las fiestas de la ciudad en honor a San Froilán, el patrón de la ciudad, ya que en esta fecha murió el santo nacido en Lugo en el año 833.

Y una de las principales atracciones de estas fiestas son las casetas del pulpo, donde se puede degustar este cefalópodo principalmente cocinado "á feira" es decir cocido y sazonado con aceite de oliva, sal y pimentón (paprika). Hoy en día las casetas son estructuras de madera muy bien construídas y decoradas, cómodas y elegantes, tanto que no parece que se hayan instalado expresamente para las fiestas.

Aunque la feria tiene una duración de casi 15 días, las casetas se instalan un fin de semana antes de la fiesta y duran todo el mes de Octubre. En total son cinco, pero nosotros tenemos por costumbre ir cada año a la de Aurora do Carballiño.   
 

  
Aurora Baranda es toda una institución en el mundo de las "pulpeiras", nació en Arcos, un pueblo de O Carballiño, en Ourense, y comenzó en el oficio ayudando a sus padres, que eran pulpeiros. Visita Lugo anualmente desde 1945. 

Después de esta pequeña introducción, paso a explicarles la visita y degustación que realizamos en su caseta. Nosotros vamos ese primer fin de semana que se instalan ya que con niño pequeño es más tranquilo para todos, por eso no se ve casi gente en las fotos,  pero les aseguro que este pasado fin de semana  (5 de Octubre) y hasta el 13 del mes, no cabe ahí ni un alfiler por lo que resulta imprescindible reservar con antelación.

Exterior de la caseta

La caseta por dentro
La tradición en Galicia es comer las raciones del pulpo á feira con cachelos que son patatas (papas) cocidas, y pan de aldea, así que pedimos una ración de cada para empezar. (Se me olvidó fotografiar el pan)

Pulpo á feira

Cachelos
El pulpo estaba en su punto: ni blando ni duro. Considero maestros a estas personas que conocen el punto de los alimentos: he probado varias veces este plato y de verdad que éste es el mejor, además, ese ligero picor del pimentón, lo hace un platillo delicioso. Una ración no nos bastó, así que repetimos pulpo. Es costumbre acompañar este típico plato con algun tinto gallego pues la acidez de estos vinos contrasta maravillosamente con el sencillo pero exquisito aliño del pulpo. Nosotros pedimos en esta ocasion un tinto de la casa.

Vino de la casa
 Dimos buena cuenta de él.

No quedó nada
 Y después de tan rico plato llegó el turno del postre, en esta ocasión nos decantamos por tejas y cañas, a cuál más ricas.

Cañas y tejas
 Para rematar tan opípara cena, un suave y calentito café de puchero.

Café de puchero

Sobre el precio, la cena para dos y medio no llegó a 40 euros, lo que me parece bastante razonable. 

Espero que se animen a acercarse a Lugo el próximo año para las fiestas de la ciudad o en algún otro momento, ya que Aurora do Carballiño ha inaugurado un restaurante este Octubre, y a partir de ahora la tendremos todo el año. En cuanto visitemos sus nuevas instalaciones les informaré al respecto.










4 comentarios:

  1. Muy bien Naye, muy interesante la reseña. Se antoja y yo que ya lo e probado se me hizo agua la boca.

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  2. Mmmm! El reportaje de la cena da mucha envidia ... y ganas de ir a comer pulpo ya!!
    Por cierto, riquísimos tanto el pan de muerto como las mantecadas que preparaste.
    Gracias

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    Respuestas
    1. Me alegra les haya gustado, y ya saben, cuando quieran vamos con Aurora :)

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